Las consecuencias de nuestra alimentación sobre nuestra ecología externa e interna.
Como decía Heráclito : « La salud del hombre es el reflejo de la salud de la Tierra ».
Estamos obligados a constatar que ambas están en peligro principalmente por nuestra forma de alimentarnos.
En efecto, hace falta tantos combustibles fósiles para fabricar la comida moderna, como para calentar las casas o propulsar los coches. Hace falta tantas materias primas para la alimentación industrial como para fabricar unos coches o unas máquinas. Esta industria alimentaria usa 20 veces más agua que las familias:hacen falta 400 litros de agua por hora, durante las 24 horas, para satisfacer las necesidades alimentarias de una sola persona.
La producción de carne vacuna requiere 80 veces más agua que las patatas y los plátanos.
El ganado contribuye a la contaminación del agua mucho más que toda la industria y todas nuestras alcantarillas juntas.
En Estados Unidos el problema de las deyecciones animales está cobrando unas proporciones enormes con las cantidades en juego. La industria de la carne en Estados Unidos produce 61 toneladas de estiércol, o sea 130 veces el volumen de las deyecciones humanas, osea 5 toneladas por cada americano. Según la agencia de protección del medio ambiente, los cerdos, bueyes y pollos contribuyeron a contaminar 56.315 Km de ríos en 22 Estados, y la capa freática en 17 Estados.Un organismo microscópico, el Pfíesteria, que se alimenta de fósforo y nitrógeno presentes en el estiércol, es muy tóxico para el ser humano y los peces .En 1.991, 1.000 millones de peces han muerto por el Pfíesteria en el río Neuse en Carolina del Norte. Desde 1.995, una cantidad similar ha sido matada por el estiércol derramado en los esturios y ríos de Carolina y los ríos de Maryland y Virginia que desembocan en Chesapeake Bay. Esos fallecimientos pueden vincularse directamente con los 10 millones de cerdos criados en Carolina del norte y los 620 millones de aves de corral en la orilla sur de Chesapeake Bay. En el Estado de Virginia, el nivel de coliformas fecales peligrosas para la salud está fijado en 200/100 ml. de agua. En 1.997,algunos ríos tenían tasas de hasta 424/100 ml.
De una producción de 50 millones de toneladas de antibióticos producidos anualmente en Estados Unidos, 20 millones van a los animales:16 administrados a las aves de corral para que engorden más rápido, y para controlar las enfermedades procedentes de la crianza industrial, con unos animales hacinados en unos espacios restringidos:anemia, gripe, diarrea, mastitis, neumonía, etc. El 20% de los pollos son portadores de Salmonelosis y 80% se contaminan por Campylobacter en los mataderos y fábricas de transformación.Las condiciones industriales de crianza enferman a los animales. Por ejemplo, un estudio demuestra que 80% de cerdos llegan al matadero conneumonía.
Se cuentan 5.000 muertes y 76 millones de casos de intolerancia alimentaria cada año en los Estados Unidos.
Las Naciones Unidas informan que las 17 zonas pesqueras más importantes del planeta alcanzaron su límite o bien están en déficit y la tercera parte de toda la pesca va a la alimentación de los animales de crianza.
La producción, el transporte, la preparación y venta de los alimentos absorben unos 16,5% de toda la energía de los Estados Unidos, donde el 75% de la alimentación tiene origen industrial.
Se calculó que bastaría con 5% de las superficies arables si toda la población norteamericana adoptara la dieta vegetariana, esto en la llamada agricultura biológica, sin productos químicos artificiales. Entonces un programa de reforestación masiva podría llevarse a cabo.Cuando se trata de destrucción del medio ambiente y de golpes contra la homeostasis planetaria por lo que ocurre en el Tercer Mundo, tan sólo olvidamos de considerar que el Occidente lo mira cual depósito natural práctico, y lo destroza sin el menor escrúpulo.Así es como 50 hectáreas de selva tropical húmeda desaparecen del globo a cada MINUTO, para hacer carne y devolver deudas ficticias,amenazando de esta manera el abastecimiento de la humanidad en oxígeno.
Cada bolita de carne para hamburguesa hace desaparecer 5 metros cuadrados de selva tropical.Por eso los vegetarianos dicen que la carne no sólo es un asesinato sino un suicidio.El desastre ecológico del abuso de carne no sólo atañe al Tercer Mundo.« La desertificación del suelo al que debemos nuestra existencia está en marcha tanto en Europa como en Estados Unidos. Para este país, por ejemplo, nombraremos algunos datos de un artículo publicado en la revista mensual americana « The Atlantic » en noviembre de 1.989, bajo el titulo « Back to Eden », por Evaneisenberg .Este artículo informa acerca de los análisis del geneticista WesJackson, fundador de un « Land Institute » (Arkansas) donde recomienda la abolición de la agricultura actual y el retorno a una pradera de gramíneas salvajes.El proceso evolutivo empezado hace 400 millones de años para llegar a las especies actuales se ha invertido hace cerca de 10.000 años, con la llegada de un modo de vida llamada « rural » . La reja del arado, sin duda privó de porvenir a las generaciones futuras más que la espada. La pradera vive de la renta de sus intereses, mientras el trigal vive del capital.
En Estado Unidos, una tercera parte del humus ya desapareció, quemado por la inundación química.
En 1.948 hacía falta 500 toneladas de insecticidas para dejar a los insectos sólo 7% de las cosechas; 40 años más tarde, los insectos consumen más del doble, a pesar de1 0 veces más insecticidas »Todo eso para la carne, ya que 88% de la materia vegetal así obtenida sirve para alimentar a los cerdos, bueyes, aves de corral.
Si 4 millones de campesinos americanos han dejado la tierra desde 1.938,sólo es para abandonarla a unas empresas de destrucción agrícola cada vez más eficientes, que exportan sus métodos y productos químicos, y hasta sus semillas tratadas por la biotecnología, hacia el Tercer Mundo.
Añadamos que actualmente vemos regiones enteras sin agua potable, por la contaminación con nitratos y estiércol, así como una epidemia de encefalitis en los bovinos que ingieren residuos animales a modo de comida.
Una sociedad enteramente nueva podría librarse del caos si las opciones fundamentales apuntaran a una conducta vegetariana, o sencillamente más vegetariana.
Ejemplos:El mejor rendimiento alimentario por hectárea lo tienen las huertas.En el borde de las carreteras se podrían plantar nogales y castaños: una doble línea de árboles, en un tramo de sólo 16 kilómetros, ya correspondería a una superficie de 46 hectáreas.Los árboles frutales pueden servir para la reforestación, con las mismas ventajas ecológicas de conservación de la capa de humus.
Un autor americano que quedó desconocido:Bruno Schubert había publicado en 1.967, en California, un librito excelente, demostrando cómo un cambio alimentario de este tipo, junto con una reforma económica allegada a las tesis de la economía franca de Gesell o de la economía distributiva de Duboin, podía transformar la sociedad y conducirla a una edad de oro.Su titulo: « La supervivencia de la humanidad ». Desgraciadamente,no es posible encontrarlo.Cuando se sabe que, en la superficie de 5 terrenos de fútbol, 100 personas pueden vivir de semillas pero tan sólo 2 de carne vacuna, la elección entre abuso de carne y vegetarianismo es la clave del problema planetario y luego de la supervivencia de nuestra especie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario